Los dos primeros episodios de Supernatural esta temporada tuvimos a los Winchester poner sus manos sobre la tableta de la Palabra de Dios, pero el tercer episodio parece estar regresando al territorio de monstruo, que puede ser igual de sea lo más agradable si se hace bien. Y Supernatural a menudo lo hace bien.
El argumento se desarrolla en torno a los Winchester con un nuevo caso, donde investigan que todas las víctimas de asesinato que recibieron órganos de un mismo donante. El padre de Jensen Ackles hace una aparición especial como un detective de la policía, que interactúa con Sam y Dean cuando se miran en el caso.
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